Resumen
Este ensayo explora la relación entre el tiempo, la vida y la técnica a partir de un enfoque crítico denominado cronoética. Parte de la controversia entre Bergson y Einstein: el primero defendía el tiempo vivido como duración cualitativa, mientras el segundo concebía un tiempo físico y mensurable. Desde la medicina y la biología, la cronobiología muestra cómo la vida se organiza en ritmos (cardíacos, respiratorios, metabólicos, endocrinos y circadianos) cuya desincronización compromete la supervivencia. Sin embargo, lo humano se define también por la capacidad de transgredir los ritmos vitales, tanto en el propio cuerpo (obstinación terapéutica, transhumanismo, manipulación hormonal, criopreservación) como en otras especies y ecosistemas (domesticación, agricultura intensiva, biotecnologías). En el plano social, la cronopolítica revela cómo los dispositivos técnicos —desde relojes de agua hasta big data y aplicaciones de monitoreo— imponen regímenes políticos y simbólicos de sincronización que configuran la vida colectiva. Autores como Virilio, Dussel, Stiegler y Attali muestran cómo la aceleración y la homogeneización temporal operan como formas de poder. El “gran gramatizador” anticipado por Dahl y la inteligencia artificial generativa actual ejemplifican la automatización cultural acelerada. Frente a estas dinámicas, la cronoética se plantea como un marco crítico que defiende el reconocimiento de la pluralidad de los ritmos vitales, la tensión entre autocronía (tiempo de sí) y heterocronía (tiempo de los otros), el cultivo de las virtudes del tiempo (la prudencia y el cuidado) y la necesidad de habitar un tiempo vital significativo, más allá de la lógica de la sincronía productivista.
Presentadores
Boris PintoAssociated professor, Bioethics Department, El Bosque University, Cundinamarca, Colombia
Details
Presentation Type
Ponencia temática de un trabajo
Theme
Tema destacado de 2026: Transformaciones antropocéntricas de la IA
KEYWORDS
Ética, Tecnología, Bioética, Inteligencia Artificial
