En el contexto de las ecologías de e-learning, el nuevo aprendizaje o aprendizaje transformador se refiere a un enfoque que promueve la construcción de conocimiento mediante experiencias significativas, críticas y participativas, con un fuerte énfasis en la agencia del estudiante, la diversidad cultural, la inclusión digital y el pensamiento reflexivo. Es un modelo que deja atrás la instrucción pasiva tradicional, para dar paso a una educación más centrada en el sujeto que aprende.

Inspirado en los planteamientos de Kalantzis y Cope (2008), este enfoque se articula a través de ocho dimensiones de diseño pedagógico: experiencias, conceptos, análisis, aplicaciones, reflexión, colaboración, diferenciación y evaluación integrada. Así, se busca formar aprendices capaces de transferir lo aprendido a nuevos contextos, generar soluciones creativas y participar activamente en la transformación de su entorno.