En mi caso, tengo una conducta compulsiva saludable: correr en las mañanas. Aunque algunos días no tenga mucha motivación, salgo igualmente porque sé que, en ocasiones, obtengo un gran bienestar físico y mental. Después de correr, a veces siento un aumento de energía, claridad mental y mejor estado de ánimo; sin embargo, esta sensación intensa no aparece siempre con la misma magnitud.

El refuerzo es precisamente esa sensación de bienestar, que surge de manera variable. Por ello, considero que se trata de un programa de razón variable (ya que no sé en qué corrida aparecerá esa sensación tan intensa) y también puede interpretarse como un intervalo variable (porque, si dejo pasar más días sin correr, a veces el bienestar vuelve con más fuerza).

Referencia breve:
Este ejemplo se relaciona con la teoría del condicionamiento operante de Skinner, que explica cómo los programas de refuerzo variables pueden sostener conductas a largo plazo, generando hábitos o compulsiones saludables.

📎 Enlace de interés: Artículo sobre refuerzo variable y hábitos saludables